Me sorprendió mucho conocer hace unos días, que un médico de la medicina “científica, alopática, oficial, académica,” derivaba a uno de sus pacientes, a un profesional de la PNL para completar un tratamiento. Me pareció digno de elogio.
Me parece sorprendente -e ilusionante- que una entidad aseguradora de salud, esté facilitando a los pacientes que están pasando por un tratamiento oncológico la posibilidad de apoyar ese tratamiento con sesiones de Reiki.
El crecimiento de las terapias alternativas es un hecho innegable. Lo que conduce a pensar que existen grandes profesionales que dominan la técnica que practican con excelentes resultados y que ello a su vez contribuye a que exista cada vez más confianza en las soluciones que proponen.
La existencia de un mercado en crecimiento en este sector, anima a muchos a formarse seriamente con la ilusión de poder dedicarse a ello profesionalmente. Pero, ¿Qué es lo que transforma a un terapeuta en un emprendedor?
Seth Godin, experto en marketing, señala en su libro “The Icarus Deception” tres habilidades que posee, en mayor o menor medida, todo emprendedor y que aprovecho para convertirla en una propuesta personal dirigida especialmente a terapeutas que quieran convertirse en emprendedores: (1) gestionar el miedo, (2) pensar como un artista y (3) generar conexiones con sus clientes.
1.- Si estás en el punto de comenzar tu proyecto como terapeuta, “gestionar el miedo” significa que la sola idea de dejar nuestro entorno conocido y seguro -¿conocido y seguro?- para empezar algo nuevo –emprender- genera esa emoción. “Gestionar el miedo” significa aprender la habilidad de escuchar tu propia voz, advirtiendo del riesgo y ser capaz de hacer algo constructivo con ello.
Sabemos que los mensajes (programados) de nuestra mente inconsciente, que generan el miedo, cumplen la bien intencionada función de asegurar nuestra supervivencia. Pero ¿está realmente tu vida en peligro?
Si estás en el punto de comenzar tu proyecto, ¿qué estrategia te puede ser útil para soslayar el miedo? Te propongo especialmente dos:
(1.-) Planifica (escribiendo): Comparte tu plan con tu mente. Porque si planificas le “explicas” el recorrido y ahorras a tu mente parte de la incertidumbre que todo proceso de cambio genera.
(2.-) Cambia los mensajes que te sueles contar: Por ejemplo, cambia el “emprender es sobrevivir” o el “emprender es difícil” por el “emprender es disfrutar, aprender, divertirse y vivir de ello”.
2. Si estás en el punto de comenzar tu proyecto, “pensar como un artista”, es el reto de romper normas para realizar algo que transforme el mundo en el que vives.
Tratar de transformar, es el reto de afrontar el riesgo de ser rechazados.
Pensar como un artista significa plantearte crear cosas únicas, (porque somos únicos)
Pensar como un artista es conectar con la esencia de nosotros mismos. Y descubrir que cuando somos nosotros mismos, nuestra esencia, exhibimos nuestro arte y entonces es cuando el miedo se esfuma.
Es dejarte inspirar al conectar con tu intuición. Confiar en estar haciendo lo correcto.
Pensar como un artista es crear valor. Nuestro propio valor; que tiene que ver con nuestra forma de solucionar un problema.
Si estás en el punto de comenzar tu proyecto, “generar conexiones con tus clientes” es “conectar lo desconectado”; que significa entender el problema que tiene tu cliente y la mejor forma de solucionarlo.
Conectar con otros, es conectar uno a uno. Pensar en personas concretas. En pasos concretos que conducirán a soluciones concretas.
Conectar tiene que ver con el atrevimiento. Con la filosofía de hacer (hacer siempre es mejor que no hacer). Tiene que ver con “hacer juntos para…”
Conectar es el objetivo. Porque da la medida de si marcas una diferencia para las personas.
Tiene que ver con alejarse de lo “aburrido y seguro” y explorar el mundo que quieres ver realizado.
Simple y sencillamente los 3 consejos que necesitaba para culminar mi sueño, muchisimas gracias a blogs como este y al de exitoxminuto por ayudarme en este recorrido y por demostrarme con cada nuevo articulo como crecer mas a nivel de emprendimiento!